Este pequeño pueblo de Zaragoza, con apenas un par de decenas de habitantes, quiere dar vida a sus calles

Frente a la despoblación, cada vez son más los pueblos de Aragón que promueven iniciativas para recuperar su vitalidad. En este caso, la propuesta es clara: una vivienda nueva a estrenar y un contrato laboral estable

En el corazón de Aragón, donde los paisajes esteparios se funden con el silencio de la historia, hay pequeños municipios que se niegan a desaparecer. La provincia de Zaragoza esconde auténticos tesoros rurales donde la vida tiene otro ritmo, y ahora uno de ellos ha decidido dar un paso valiente: busca nuevos vecinos y ofrece casa y trabajo a quien quiera empezar de nuevo.

Frente al avance de la despoblación, cada vez son más los pueblos de Aragón que promueven iniciativas para recuperar su vitalidad. Y no se trata de promesas vacías. En este caso, la propuesta es clara y directa: una vivienda nueva a estrenar, un contrato laboral estable y la posibilidad real de integrarse en una comunidad acogedora.

Este pequeño pueblo de Zaragoza, con apenas un par de decenas de habitantes, quiere dar vida a sus calles y abrir las puertas a quienes anhelan tranquilidad, naturaleza y un empleo digno. Pero su nombre no lo revelamos todavía..

ALMOCHUEL, EL PUEBLO DE ZARAGOZA QUE OFRECE CASA Y TRABAJO
UNA OFERTA QUE HA TENIDO UNA ACEPTACIÓN SORPRENDENTE
QUÉ VER Y HACER EN ALMOCHUEL
CÓMO LLEGAR A ALMOCHUEL

ALMOCHUEL, EL PUEBLO DE ZARAGOZA QUE OFRECE CASA Y TRABAJO

Hablamos de Almochuel, una pequeña localidad situada en el Campo de Belchite, que ha lanzado una oferta singular: busca una familia para asumir el trabajo de operario municipal y la gestión del multiservicio rural. Todo ello acompañado de una casa completamente nueva, lista para entrar a vivir.

El puesto es a jornada completa y con contrato estable, con funciones que van desde el mantenimiento del pueblo hasta la realización de labores generales de conservación y limpieza del entorno urbano. Una doble vía de ingresos para quien esté dispuesto a echar raíces en el territorio aragonés.

Con solo 22 habitantes censados, Almochuel no solo busca cubrir una plaza, sino también recuperar la vida cotidiana que antaño bullía en sus calles. La propuesta está pensada especialmente para familias que deseen alejarse del ritmo frenético de la ciudad sin renunciar a estabilidad y proyección de futuro.

UNA OFERTA QUE HA TENIDO UNA ACEPTACIÓN SORPRENDENTE

La noticia ha corrido como la pólvora. Y no es para menos: en un contexto donde cada vez más personas sueñan con mudarse al medio rural, encontrar un pueblo cerca de Zaragoza que ofrezca empleo y vivienda no es algo habitual. Almochuel ha recibido una avalancha de solicitudes de dentro y fuera de Aragón.

La clave del éxito está en la claridad de la propuesta: una vida sencilla, sí, pero con garantías. Un contrato fijo, una casa nueva y la posibilidad de formar parte activa de la comunidad, colaborando en actividades municipales, eventos locales y en el día a día del pueblo.

Esta fórmula está siendo observada con atención por otros pueblos de Aragón, que buscan replicar modelos de repoblación viables, realistas y, sobre todo, humanos.

QUÉ VER Y HACER EN ALMOCHUEL

Almochuel no es solo una oportunidad laboral: también es un lugar donde vivir bien. Rodeado de campos, senderos y naturaleza virgen, es ideal para quienes disfrutan del silencio, los paseos al aire libre y la vida sin relojes. Su entorno forma parte del ecosistema característico del Campo de Belchite, con amplias llanuras y cielos abiertos.

A pesar de su tamaño, mantiene elementos patrimoniales de interés, como su iglesia y su arquitectura rural, que reflejan el alma de los pueblos de la provincia de Zaragoza. Las fiestas locales, aunque modestas, son el reflejo de una comunidad que no ha perdido su esencia y que está dispuesta a compartirla.

CÓMO LLEGAR A ALMOCHUEL

Ubicado a unos 50 kilómetros de Zaragoza capital, Almochuel es fácilmente accesible en menos de una hora por carretera. Esta cercanía lo convierte en uno de los pueblos cerca de Zaragoza con más potencial para atraer nuevos habitantes sin aislarse del todo del entorno urbano.

Este equilibrio entre ruralidad y conexión con la ciudad es uno de sus grandes atractivos. Vivir en Almochuel significa apostar por otro modelo de vida, más tranquilo y conectado con la tierra, pero con la seguridad de tener cerca todos los servicios de una gran capital.