UN NUEVO PREDICADOR EN EL VATICANO
Nos hemos enterado el 16 de noviembre que ha sido designado, un nuevo predicador en la casa pontificia en reemplazo del veterano Raniero Cantalmessa, quien ocupó el cargo desde 1980 hasta el 2024. Se trata del padre Roberto Pasolini, cuya defensa de la homosexualidad, suscitó más de 84 comentarios.
El primero de ellos es el de Miguel, que lamenta que no exista la Santa Inquisición, después, aparece Rigidus, que no parece seguidor del padre Santiago Martín y sus masturbaciones intelectuales, quien escribe: “Francisco nombra a sus amigos que piensan como él, con quien coincide Opinión laica, quien escribe: “Esto ya es demasiado. la designación del padre Pasolini, con su exégesis imaginativa blasfema, refleja la esencia del corazón de la pluma que lo nombró: Francisco”.
DCe exclama: ¡Cómo manipulan el texto bíblico para defender sus ideologías, teorías y herejias! ¡Que vergüenza y qué absurdo! ¿Puede salir algo bueno del Vaticano?
Pedro de Torrejón escribe desolado: “El papa Francisco no puede nombrar a nadie que comulgue con las Sagradas Escrituras y la tradición de la Iglesia”.
Ubaldo acusa a los ojos torcidos “que pasan todo por las gafas de la homosexualidad, con lo cual “no puede existir una relación de amistad entre hombres”.
Nova, con relación a las palabras del nuevo predicador escribe: “La interpretación que hace este hombre de las Sagradas Escrituras, es depravada y blasfema. Y seré muy clara: Si el papa Francisco se ha creído que va a imponernos esta forma miserable de pensar va listo. El papa es el vicario de Cristo, pero no es Cristo mismo y su misión consiste en custodiar y enseñar el depósito de la fe, no en desvirtuarlo. Francisco tendrá que rendir cuentas ante Dios por todo el daño que está haciendo a la Iglesia y a la fe de la gente sencilla. Y la gran mayoría de los obispos tendrán que responder por su silencio cobarde ante la multitud de hechos y dichos pontificios contrarios a la fe católica”.
- Flavius escribe que el nuevo predicador “tiene que volver a leer la Biblia, deteniéndose en Judas, 1, 7: “También Sodoma y Gomorra, con las ciudades circunvecinas, por haberse prostituido como aquellas y por haber practicado vicios contra la naturaleza, quedan ahí como muestra, quedan ahí como fuego eterno”.
Oscar recuerda: “Que hay que tener misericordia con las personas homosexuales no es novedad, ya lo dice el Catecismo. Que las Sagradas Escrituras contemplen su ejercicio es una verdadera novedad, pero esto equivale a no considerarlas Sagradas, sino un chicle que se masca y se estira al gusto. Por último: mezclar a Nuestro Señor Jesucristo en estas elucubraciones de ciencia ficción, me parece directamente blasfemo”.
El título de la noticia dice: “Controversia en el Vaticano. Nuevo predicador de la Casa Pontificia afirma que la Biblia no condena la homosexualidad” y comenta que “En su defensa de la homosexualidad, Pasolini ha invitado a imaginar al rey David como el amante gay de Jonatán o al centurión que pidió al Señor salvar a su siervo enfermo como el posible amante gay del mismo”.
Pareciendo criticar a quienes mantienen la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad, Pasolini comentó que “Cristo mostró misericordia hacia las personas en el ámbito de la sexualidad, o en el ámbito de aquellas cosas que socialmente ponen a las personas en sus márgenes”, repitiendo así uno de los temas recurrentes del papa Francisco en el Sínodo de la Sinodalidad.
Hemos comenzado por los comentarios que nos mostraron que los esfuerzos de Santiago Martín por ocultar al gran responsable de la confusión han fracasado, ya no engaña a casi nadie, solo a algún tonto que todavía le cree.
Hemos seguido con la noticia de la designación del padre Pasolini para el cargo de predicador.
Ahora, corresponde nuestro comentario acerca de un tema penoso, porque afecta al papa, a nuestro papa Francisco, que enfermo de soberbia, goza en confundirnos y envolvernos en su confusión.
La más grave es que se cree un super Cristo, capaz de enmendar al mismo Cristo olvidando que es solo su vicario, custodio de una doctrina que recibió en depósito como custodio, para conservar y transmitir.
No se trata aquí, de la inocente confusión de esa buena religiosa, que se presentó a Juan XXIII como “superiora del Espíritu Santo” y que recibió rápida respuesta del papa: “La felicito, madre. Yo soy solo el vicario de Cristo”.
Aquí nos encontramos con un desubicado que se cree competente para enmendar y corregir a Cristo, cuando le parece que las Sagradas Escrituras no concuerdan con sus enfermizas ideologías.
Olvida que Cristo es eterno y que él, como todos nosotros, es solo un hombre, mortal, efímero, amenazado de próxima desaparición.
Yo, si fuera él me callaría, anticipando mi silencio eterno, pero él continúa su tarea demoledora, contradictoria, cuando sus hechos desmienten a sus palabras, aumentando el barullo y la confusión.
Basta pensar en la reacción de los fieles ante este insólito nuevo nombramiento… basta pensar en tantas energías que podrían ordenarse a la nueva evangelización, al crecimiento del cristianismo, a la recuperación de la cristiandad, que en cambio se utilizan para corregir, iluminar, aclarar las cosas para no naufragar en este océano de ambigüedades y oscuridades.
Pero es nuestro papa, pidamos a Dios, por él y por la Iglesia. Pidamos por la barca de Pedro, para que no continúen ahogándose sus pasajeros.
Buenos Aires, diciembre 30 de 2024.
Bernardino Montejano
No hay comentarios:
Publicar un comentario