Empezamos con la Señal de la Santa Cruz:
PER SIGNUM CRUCIS
Per signum Sanctae Crucis (✞) de inimícis nostris (✞) líbera nos, Deus noster (✞).
In nómine Patris, et Fílii, et Spíritus Sancti. Amen.
SEÑAL DE LA SANTA CRUZ
Por la señal de la Santa Cruz (✞), de nuestros enemigos (✞), líbranos, Señor, Dios nuestro (✞).
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Seguimos con el Acto de Contrición:
CONFÍTEOR Confíteor Deo omnipoténti, beátæ Maríæ semper Vírgini, beáto Michaéli Archángelo, beáto Joanni Baptístæ, sanctis Apóstolis Petro et Paulo, ómnibus Sanctis, et tibi, Pater: quia peccávi nimis cogitatióne, verbo et ópere: mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa. Ídeo precor beátam Maríam semper Vírginem, beátum Michaélem Archángelum, beátum Joánnem Baptístam, sanctos Apóstolos Petrum et Paulum, omnes Sanctos, et te, Pater, oráre pro me ad Dóminum Deum nostrum . |
ACTO DE CONTRICIÓN
Yo, pecador, me confieso a Dios Todopoderoso, a la Bienaventurada siempre Virgen María, al Bienaventurado San Miguel Arcángel, al Bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos, y a vos, Padre, que pequé gravemente con el pensamiento, palabra, obra y omisión: por mi culpa, por mi culpa, por mi gravísima culpa. Por tanto ruego a la Bienaventurada siempre Virgen María, al Bienaventurado San Miguel Arcángel, al Bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos, y a vos, Padre, que roguéis por mí a Dios Nuestro Señor. |
Continuamos con el Credo. Existen dos Símbolos de fe o Credos. El lector puede rezar cualquiera de los dos (el Símbolo de los Apóstoles o el Niceno constantinopolitano).
CREDO (SÝMBOLUM APOSTOLÓRUM) Credo in Deum, Patrem Et in Jesum Christum, Fílium ejus únicum, Dóminum nostrum, qui Descéndit ad Inféros; tértia die Credo in Spíritum Sanctum, |
CREDO (SÍMBOLO DE LOS APÓSTOLES) Creo en Dios Padre, Todopoderoso, Y (creo) en Jesucristo, su Único Hijo, Descendió a los Infiernos; al tercer día resucitó de entre los muertos. Creo en el Espíritu Santo, |
CREDO (NICENO CONSTANTINOPOLITANO)
Credo in unum Deum, Patrem omnipoténtem, factórem Et in unum Dóminum Jesum Christum, (Arrodillarse para adorar el Verbo encarnado): Et incarnátus est de Spíritu Sancto ex María Vírgine: et homo factus est. Crucifíxus étiam pro nobis: sub Póntio Piláto passus, et sepúltus est. Et resurréxit tértia die, secúndum Scriptúras. Et ascéndit in caelum: sedet ad déxteram Patris. Et íterum ventúrus est cum glória judicáre vivos et mórtuos: cujus regni non erit finis. Et in Spíritum Sanctum, Dóminum, et vivificántem, qui ex Patre Filióque prócedit. Qui cum Patre et Fílio simul adorátur, et conglorificátur. Qui locútus est per Prophétas. Et unam sanctam, catholicam, et apostólicam Ecclésiam. Confíteor unum baptísma in remissiónem peccatórum. |
CREDO (NICENO CONSTANTINOPOLITANO)
Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la tierra, Y en un solo Señor, Jesucristo, (Arrodillarse para adorar al Verbo encarnado): Y se encarnó, por obra del Espíritu Santo, de María Virgen: y se hizo Hombre. Crucificado también por nosotros, padeció bajo el poder de Poncio Pilatos y fue sepultado. Y resucitó al tercer día, según las Escrituras. Y subió al Cielo: está sentado a la diestra del Padre. Y otra vez ha de venir con gloria a juzgar a los vivos y a los muertos: y su Reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y vivificador, que del Padre Creo en la
Iglesia que es una, Santa, Católica y Apostólica. Confieso que hay un
solo Bautismo para el perdón de los pecados. Y espero la resurrección |
Después, se rezan un Padrenuestro, tres Avemarías y un Gloria al Padre por las intenciones de la Sede Apostólica, en sufragio de las Benditas Almas del Purgatorio y para obtener las indulgencias concedidas al Santo Rosario:
PATER NOSTER
Pater noster, qui es in caelis. Sanctificétur Nomen tuum. Advéniat regnum tuum. Fiat volúntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidiánum da nobis hódie, et dimítte nobis débita nostra, sicut et nos dimíttimus debitóribus nostris. Et ne nos indúcas in tentatiónem. Sed líbera nos a malo. Amen. |
PADRENUESTRO
Padre nuestro, que estás en los Cielos. Santificado sea tu Nombre. Venga a nosotros tu Reino. Hágase tu Voluntad, así en la tierra como en el Cielo. El pan nuestro de cada día dánoslo hoy, y perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores. Y no nos dejes caer en la tentación. Más líbranos del mal. Amén. |
AVE MARIA
Ave María, grátia plena; Dóminus tecum; benedícta Tu in muliéribus, et benedíctus fructus ventris tui, Jesus. Sancta María, Mater Dei, ora pro nobis, peccatóribus, nunc et in hora mortis nostrae. Amen. |
AVEMARÍA
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres y Bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. |
GLÓRIA PATRI Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto. Sicut erat in princípio, et nunc, et semper, et in saécula saeculórum. Amen. |
GLORIA AL PADRE Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, y ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén. |
Lo siguiente es meditar los Misterios del día correspondiente mientras se rezan un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria al Padre por cada consideración (son 5 en total). Igualmente, al final de cada Misterio se reza la oración que enseñó la Santísima Virgen de Fátima:
ORÁTIO FÁTIMAE O, mi Jesu! Dimítte nobis; líbera nos ab ígne Inférni. Alléva Ánimas Purgatórii, præsértim illas quæ maxíme relíctæ sunt. Amen. |
ORACIÓN DE N. S. DE FÁTIMA ¡Oh, mi Jesús! Perdónanos; líbranos del fuego del Infierno. Alivia a las Almas del Purgatorio, especialmente, a las más abandonadas. (Nota: Otras versiones dicen lo siguiente: ¡Oh, mi buen Jesús! Perdona nuestros pecados. Líbranos del fuego del Infierno. Lleva al Cielo a todas las almas, especialmente, a las más necesitadas de vuestra misericordia). Sin embargo, preferimos la primera oración. |
Aquí están los 3 Misterios Tradicionales y únicos del Santo Rosario, con sus respectivos días:
MISTERIOS GOZOSOS
(LUNES Y JUEVES)
- La Anunciación a la Santísima Virgen y la Encarnación del Hijo de Dios. Fruto: Hacer la Voluntad de Dios.
- La Visitación de la Santísima Virgen a su prima Santa Isabel.
Fruto: La caridad y el amor al prójimo. - El Nacimiento del Niño Jesús en el Pesebre.
Fruto: El desprendimiento de las riquezas. - La Presentación del Niño Jesús y la Purificación de Nuestra Señora.
Frutos: La obediencia y la pureza.
- El Niño perdido y hallado en el templo.
Fruto: Buscar a Dios en todas las cosas.
MISTERIOS DOLOROSOS
(MARTES Y VIERNES)
- La Agonía de Nuestro Señor en el huerto de los Olivos.
Frutos: Dolor por haber pecado, contrición por nuestros pecados y propósito de enmienda. - La Flagelación de Nuestro Señor.
Fruto: Mortificación de la carne y de los sentidos. - La Coronación de espinas.
Fruto: Quitarnos la soberbia y el orgullo. - Nuestro Señor con la Cruz a cuestas.
Fruto: Paciencia en las tribulaciones. - La Crucifixión y muerte de Nuestro Señor.
Frutos: La Perseverancia Final y entregarnos a la obra de la Redención.
MISTERIOS GLORIOSOS:
(MIÉRCOLES, SÁBADOS Y DOMINGOS)
- La Resurrección de Nuestro Señor.
Frutos: La fe y la conversión. - La Ascensión de Nuestro Señor a los Cielos.
Fruto: Deseo y ansias de llegar al Cielo. - La Venida del Espíritu Santo.
Frutos: Los dones del Espíritu Santo y la caridad. - La Asunción de Nuestra Señora en cuerpo y alma al Cielo.
Fruto: La gracia de una buena muerte. - La Coronación de la Santísima Virgen como Reina y Señora de todo lo creado. Fruto: La verdadera devoción a la Santísima Virgen y su auxilio en las tentaciones, especialmente, en la hora de la muerte.
Entonces, lo anterior daría un total de cinco Padrenuestros, cincuenta Avemarías, cinco Gloria al Padre y cinco oraciones de N. S. de Fátima.
(También se puede rezar, y es muy laudable, todo el Santo Rosario completo; de esa manera, daría un total de quince Padrenuestros, ciento cincuenta Avemarías, quince Gloria al Padre y quince oraciones de Fátima).
Al finalizar lo anterior, se reza una SALVE por la conversión de los pecadores, por la propagación de la Fe Católica y por el alivio y descanso de las Benditas Almas del Purgatorio:
SALVE REGINA Salve, Regína, Mater Ad Te clamámus, éxsules, Eia ergo, Advocáta Nostra, Et Jesum, Benedíctum fructum ventris O clemens! O pia! O dulcis Virgo María! V. Ora pro nobis, Sancta Dei Génitrix. |
SALVE Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y A Ti clamamos los ¡Ea, pues, Señora Abogada nuestra! Y después de este destierro, muéstranos ¡Oh, clementísima! ¡Oh, piadosa! V. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. |
Para finalizar, recitamos las Letanías de la Santísima Virgen María.
LITANIAE SANCTÓRUM Kýrie, eléison. Kýrie, eléison. Christe, áudi nos. Christe, áudi nos. Pater de cælis Deus, miserére nobis. Sancta María, ora pro nobis Agnus Dei, qui tollis peccáta mundi, parce nobis, Dómine. V. Ora pro nobis, Sancta Dei Génitrix. Oremus: Concéde nos fámulos tuos, quaésumus, Dómine Deus, perpétua mentis et córporis sanitáte gaudére; et gloriosa Beatae Maríæ semper Vírginis intercessióne, a praesénti liberári tristítia, et aéterna pérfrui laetítia. Per Christum Dóminum nostrum. Amen. |
LETANÍAS LAURETANAS Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros. Cristo, óyenos. Cristo, óyenos. Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros. Santa María, ruega por nosotros. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, perdónanos, Señor. V. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Oremos: Concede, Señor y Dios nuestro, a tus siervos gozar de perpetua salud de alma y de cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la Bienaventurada siempre Virgen María, líbranos de las tristezas presentes y llévanos a gozar de las eternas alegrías. Por Jesucristo Señor Nuestro. Amén. |
ORACIONES RECOMENDADAS AL FINAL
ORACIÓN A SAN JOSÉ, ESPOSO DE MARÍA SANTÍSIMA
A Vos recurrimos en nuestra tribulación, bienaventurado José, y después de haber implorado el auxilio de vuestra santísima Esposa, solicitamos también confiadamente vuestro Patrocinio. Por el afecto que os unió a la Virgen Inmaculada, Madre de Dios; por el amor paternal que profesasteis al Niño Jesús, os suplicamos que volváis benigno los ojos a la herencia que Jesucristo conquistó con su Sangre, y que nos socorráis, con vuestro poder, en nuestras necesidades.
Proteged, prudentísimo Custodio de la Divina Familia, el linaje escogido de Jesucristo. Preservadnos, Padre amantísimo, de todo contagio de error y corrupción; sednos propicio y asistidnos desde el Cielo, poderosísimo Protector nuestro, en el combate que al presente libramos contra el poder de las tinieblas. Y del mismo modo que, en otra ocasión, librasteis del peligro de la muerte al Niño Jesús, defended ahora a la Santa Iglesia de Dios contra las asechanzas de sus enemigos y contra toda adversidad.
Amparad a cada uno de nosotros con vuestro perpetuo patrocinio a fin de que, siguiendo vuestros ejemplos, y sostenidos por vuestros auxilios, podamos vivir santamente, morir piadosamente y obtener la felicidad eterna del cielo. Amén.
ORACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla; sé
nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas
del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes,
y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al Infierno,
con el divino poder, a Satanás y a los demás espíritus
malignos que andan dispersos por el mundo
para la perdición de las almas. Amén.
ORACIÓN POR LA RESTAURACIÓN DE LA FE CATÓLICA Y POR LOS SACERDOTES
V. Señor, danos Sacerdotes.
R. Señor, danos Sacerdotes.
V. Señor, danos Santos Sacerdotes.
R. Señor, danos Santos Sacerdotes.
V. Señor, danos muchos Santos Sacerdotes.
R. Señor, danos muchos Santos Sacerdotes.
V. Señor, danos muchas santas vocaciones religiosas.
R. Señor, danos muchas santas vocaciones religiosas.
V. San Pío X
R. Ruega por nosotros.
(Aquí suele rezarse el Ángelus).
ÁNGELUS V. Ángelus Dómini nuntiávit Maríae. Ave María, grátia plena… V. Ecce ancílla Dómini. Ave María, grátia plena… V. Et Verbum caro factum est. Ave María, grátia plena… V. Ora pro nobis, Sancta Dei Génitrix. Oremus: |
ÁNGELUS
V. El Ángel del Señor anunció a María. Dios te salve, María… V. He aquí la esclava del Señor. Dios te salve, María… V. Y el Verbo se hizo carne. Dios te salve, María… V. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Oración:
|
MAGNÍFICAT Magníficat ánima mea Dóminum. Quia respéxit humilitátem ancíllae suae: ecce enim ex hoc beátam me dicent Quia fecit mihi magna qui potens est: et Sanctum nomen ejus. Et misericórdia ejus a progénie in progénies timentibus eum. Depósuit poténtes de sede, et exaltávit húmiles. Suscépit Israël púerum suum, recordátus misericórdiae suae. Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto. |
MAGNÍFICAT Engrandece mi alma al Señor. Porque miró la bajeza de su esclava; Porque ha hecho en Mí grandes cosas el Y su misericordia se extiende de Destronó a los poderosos y ensalzó Recibió a Israel, su siervo, acordándose Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. |
SANCTA MARIA, ORA PRO NOBIS.
Y que, por la misericordia de Dios, las almas de los fieles difuntos descansen en paz. Así sea.
En el nombre del Padre(✞), y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA, MARÍA SANTÍSIMA.