Francisco prepara su legado para cuando termine su trabajo en el Vaticano. Cuál es su plan y quiénes van a quedar en el poder.
Francisco trabaja en consolidar su influencia sobre el futuro de la Iglesia Católica. Esta semana confirmó la creación de 21 nuevos cardenales de los cuales 20 tendrán menos de 80 años por lo que Francisco espera que puedan participar en el próximo cónclave, previsto para la eventual elección del sucesor del pontífice argentino.
Con este trabajo, Francisco habrá nombrado cerca del 80% de los 141 cardenales que participarán en la elección del próximo Papa.
Francisco se aleja del Vaticano y comienza a trabajar en su sucesión
El actual papa asumió su cargo en 2013 tras la histórica renuncia de Benedicto XVI, ha dejado abierta la posibilidad de seguir su ejemplo y eventualmente dejar el cargo.
Francisco nombró con destacable rapidez a los sucesores de su mandato, a razón de unos 11 cardenales por año. Para comparación, Benedicto XVI nombró a 9 por año y Juan Pablo II a solo 8 (a esto se suma que tuvo uno de los papados más largos de la historia).
Los nombres que eligió Francisco incluyen a los prelados más jóvenes destacan el australiano Mykola Bychok (44 años), el lituano Rolandas Makrickas (52) y el canadiense Francis Leo (53), así como los italianos Baldassare Reina (53), Roberto Repole (57) y Fabio Baggio (59).
Los cambios de Francisco llegan en el medio de un gran conflicto ideológico dentro de la Iglesia. Luego de la publicación del Fiducia supplicans, del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, muchos dirigentes de la Iglesia criticaron que esto podría legitimar la bendición de parejas homosexuales, algo que va en contra de ciertos dogmas de la fe.
A esto se suma el conflicto que generó el Sínodo de la Sinodalidad, una iniciativa que comenzó en 2021 y concluirá en 2024, que tiene como objetivo que la Iglesia más participativa y horizontal. Esta propuesta es resistida por lo sectores más tradicionales de la Iglesia.
Mientras el papa cierra un nuevo año como máximo líder de la Iglesia, su influencia en el Vaticano está más que clara: cuatro de cada cinco cardenales que participarán en el próximo cónclave habrán recibido el birrete y el anillo de sus manos.
Terrible futuro para la iglesia católica El Bergoglio habrá nombrado 112 de los 141 cardenales que participarán en la elección del próximo Papa, asegurando la continuidad del Comunismo y doctrinas pro tiranías en el Vaticano
Se llama fumata negra (en italiano fumata nera) a la columna de humo de color negro que sale de la Capilla Sixtina al terminar una ronda de votación del Cónclave cuando no se llega a los 2/3 necesarios para elegir un Papa. Tradicionalmente se producía tal humo por quemar las papeletas de la votación inconclusiva con paja húmeda. Actualmente, perclorato de potasio, antraceno y azufre son agregados a la quema para originarla.
La fumata blanca (en italiano fumata bianca), contrariamente, significa que hubo una votación exitosa y que hay un nuevo Papa. Tras terminar la fumata, aparece en el balcón de la Basílica de San Pedro, el cardenal protodiácono quien anuncia el Habemus Papam y da a conocer al nuevo pontífice. Para obtener dicho color, clorato de potasio, lactosa y colofonia se añaden a dicha quema.
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